El uso de la resina epoxi hoy en día su uso llega incluso a usos sobre suelos domésticos debido a que son unos suelos especialmente agradecidos que no requieren un mantenimiento exhaustivo para lucir limpios y brillantes, siempre y cuando se tengan claras unas pautas básicas y se disponga de los productos y utensilios adecuados para ello.
Estos suelos son demandados en lugares con alta demanda de resistencia a la abrasión y a los productos químicos como en hospitales, talleres, fábricas y almacenes. Son usados en áreas con alta humedad y en establecimientos comerciales o de ocio para mejorar la apariencia del suelo.
Estos tipos de suelos son sencillos de limpiar y muy agradecidos, siempre que se tengan claros los conceptos técnicos y se disponga de los productos y herramientas apropiados para hacerlo. Lo que queremos dar a entender es que la limpieza de estos suelos es más rápida, con un menor consumo de agua y detergentes que el resto de los suelos, aunque también es cierto que la ausencia de poros y el acabado especial de esta superficie, evidencian inmediatamente cualquier suciedad presente.
A continuación vamos a explicar algunos de los problemas más habituales de la limpieza de estos suelos:
- Desgastes, rayones y manchas debido al tráfico peatonal, derrames, maquinaria pesada que pueden dejar marcas sobre la resina epoxi. Esto también puede dañar la capa superior y permitir que la humedad, suciedad, mugre afecten las capas inferiores, lo que puede causar problemas en el futuro.
- Con el tiempo, los pisos comerciales en espacios de uso intensivo como cocinas de restaurantes y bares, espacios de mantenimiento de hospitales y duchas en gimnasios pueden sufrir desgaste, lo que dificulta mantener limpias las secciones del piso. Esto suele suceder cuando una capa superior se desgasta y exponen las capas de abajo.
- Un piso comercial puede tener un drenaje deficiente que genera desafíos continuos de limpieza, especialmente en edificios más antiguos. El agua estancada en el suelo se debe a la falta de desagües o desagües mal colocados.
- Usar fregonas de algodón clásico con agua caliente o tibia no es la forma más efectiva o higiénica de limpiar. Con el tiempo, el algodón retiene la suciedad, gérmenes o los residuos de jabón se quedan en el suelo para atraer la suciedad. Las fregonas de algodón también pueden dejar un exceso de agua sobre la superficie, lo que provoca resbalones.
- Delaminación del suelo ocurre cuando el revestimiento o material se separa. La limpieza de un suelo delaminado puede ser casi imposible debido a los huecos y al subsuelo expuesto. Los espacios entre el material del suelo y el contrasuelo pueden atrapar suciedad, polvo y otros desechos, lo que dificulta la limpieza completa de la superficie.
- La grasa y el aceite pueden ser un problema común para los suelos de epoxi. Si estos contaminantes no se eliminan correctamente en su momento, pueden hacer que el epoxi se despegue, se astille o provoque erupciones en la resina, pequeños montículos denominados “ojo de pez”.
- Amarillamiento del suelo, como puede ser el simple fenómeno de exposición al sol, afecta a la transparencia y pigmentación de la resina, así como la no eliminación de grasas y contaminantes, los cuales, si no se eliminan en su momento y correctamente, también afectan a la transparencia y pigmentación.
Y a continuación explicamos unos sencillos pasos para su correcto mantenimiento:
- PROTECCIÓN: utilice felpudos y de esta manera evitará que el 80% de suciedad que puede terminar sobre su suelo a través de los zapatos se quede sobre la resina. Esta simple protección también evitará el 80% de rayones sobre la resina.
- MOPEAR O BARRER: preferiblemente mopear, pero no use mopas de algodón, use mopas de microfibra que no absorben hacia su interior. El algodón absorbe suciedad, abrasiva, restos húmedos que luego impregnan las superficies. Use siempre limpiador de mopa base agua. Evite barridos siempre que pueda, el barrer con cepillos convencionales levanta siempre polvo.
- FREGAR: Use siempre fregonas de microfibra. El producto de limpieza a usar debe de ser totalmente biodegradable y que no dañe el brillo de los suelos, sin fosfatos, no abrasivo y no inflamable.
- FREGADO MECÁNICO: el uso de fregadoras automáticas sobre suelos de resina epoxi es totalmente recomendable en grandes superficies, proporcionan un fregado más intenso y profundo.
- FREGADO PROFUNDO: Es recomendable para el fregado profundo usar máquinas rotativas. Usar discos almohadilla no agresivos, normalmente rojos. La fregadora automática facilita la recogida simultánea del agua, lo que repercute en menos humedad sobre el suelo de resina epoxi.
- FUERTES DESENGRASADOS: cuando un suelo de resina epoxi está lleno de grasa y suciedad solidificada, es evidente que un limpiador neutro no tendrá la fuerza suficiente como para desintegrar la misma. En estos casos, debemos usar un desengrasante con terpenos cítricos, biodegradable y sin solventes tóxicos, totalmente sostenible y sin fosfatos, caso contrario, dañaremos la resina.
Vamos a añadir tambien alguna de las preguntas más frecuentes que se suelen hacer a la hora de limpiar los suelos de resina epoxi.
– ¿Cómo se quitan las manchas de estos suelos de resina?
Siempre hay que absorber primeramente el derrame con papel o bayeta absorbente para eliminar el contaminante. Acto seguido, usar el limpiador neutro o limpiador desengrasante adecuado para acabar de eliminar el derrame contaminante. Sin embargo, esto puede no ser siempre posible y debemos de proceder con los fregados arriba indicados.
– ¿Puedo usar amoníaco para limpiar un suelo de epoxi?
No se recomienda el uso de amoníaco para limpiar suelos de epoxi, ya que es un alcalino de PH alto y va a dañar el suelo con el tiempo. Además, el amoníaco puede reaccionar con otros productos de limpieza con los que trabaja y puede generar gases nocivos para el personal que realiza la limpieza.
¿Cuál es el mejor limpiador para usar en suelos de resina epóxica?
El mejor limpiador para un suelo epóxido es un limpiador no enzimático de PH neutro, totalmente biodegradable y que no dañe el brillo de los suelos, sin fosfatos, no abrasivo y no inflamable, especialmente si le preocupa la sustentabilidad ambiental de su suelo.
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