Con estos pasos tendrás un portal limpio y bien mantenido:
1. Organiza los materiales necesarios:
- Escoba o aspiradora: Para retirar el polvo y residuos más grandes.
- Cubo con agua y detergente: Usa un limpiador apropiado según el tipo de suelo o superficie.
- Fregona: Para lavar el suelo y quitar la suciedad.
- Paños de microfibra: Para limpiar el polvo y superficies delicadas.
- Productos especializados: Si hay cristales, madera o acero inoxidable, utiliza limpiadores específicos para evitar daños.
2. Empieza desde arriba hacia abajo:
- Techos y lámparas: Primero, elimina las telarañas o polvo de las esquinas, techos y lámparas. Usa una escoba o plumero de mango largo.
- Paredes y ventanas: Limpia cualquier marca o suciedad que haya en las paredes. No olvides las ventanas; usa un limpiacristales adecuado y un paño que no deje pelusa.
3. Limpia las puertas y barandillas:
- Puertas: Desinfecta las manijas y limpia los marcos y la superficie de la puerta. Si es de madera, un limpiador específico protegerá el material.
- Barandillas: Si hay barandas, pásales un paño con limpiador desinfectante, prestando atención a las zonas donde se tocan frecuentemente.
4. Atiende las esquinas y zonas difíciles:
- Usa una aspiradora con boquilla estrecha o un cepillo para llegar a las esquinas donde se acumula más suciedad, incluyendo entre las baldosas si es un suelo de ese tipo.
5. Suelos: barrer, aspirar y fregar:
- Barrer o aspirar: Retira la suciedad suelta, como polvo, hojas o papeles. Una aspiradora ayuda si hay alfombras o tapetes.
- Fregar: Usa agua tibia y detergente suave para limpiar el suelo. Si es de mármol o piedra natural, opta por productos diseñados para estos materiales.
6. Revisa los detalles:
- Interruptores y timbres: Estos puntos de contacto son propensos a acumular suciedad, así que límpialos con cuidado usando un paño ligeramente humedecido.
- Zócalos y marcos: No olvides pasar un paño húmedo por los zócalos, ya que suelen acumular polvo con facilidad.
7. Ventila el espacio:
- Deja la puerta abierta durante unos minutos para que el aire circule y el portal quede completamente fresco.
8. Frecuencia y mantenimiento:
- Limpieza regular: Mantén una rutina semanal de limpieza para evitar acumulaciones de polvo y suciedad.